En los últimos 2 meses la Plataforma Xente Oscos-Eo, en coordinación con vecinxs del Valle del Navia y Boal hemos respondido a la avalancha de invierno de proyectos eólicos en fase de información pública.
Específicamente hemos preparado alegaciones a 7 proyectos: 2 de ellos en la comarca (Retumbadoiro y La Espina), 3 en Boal (Brañadesella, Herradura y Carrugueiro), 1 en Coaña (Lausía) y la línea de alta tensión del eje Pesoz que afecta a 13 concejos del Occidente asturiano. Además del apoyo a alegaciones preparadas por las Plataformas vecinas de la Mariña y Negueira de Muñiz para otros 3 proyectos (1 de ellos en Ibias, sierra Uría y otros 2 en la Mariña, Fonte Barreiros y Mondigo). Todas las alegaciones las podéis encontrar aquí.
Las dos últimas alegaciones han sido al Plan Especial del complejo eólico de La Espina, en el concejo de La Espina y al proyecto y Estudio de Impacto Ambiental de Carrugueiro, en el concejo de Boal, presentando más de 200 alegaciones de particulares y colectivos. En total, en los 7 proyectos a los que hemos presentado alegaciones, estimamos que más de 500 alegaciones han sido registradas (particulares y de colectivos).
Antes de entrar en los aprendizajes, nos gustaría resaltar que nos parece indignante que esto se esté realizando sin informar debidamente a la población. Además del claro posicionamiento de la Plataforma, de “parar y planificar”, dada la relevancia y potencial impacto en el territorio y para poder hablar de un proceso mínimamente “informado”, se precisarían dar al menos tres cosas, que al menos de momento no se están cumpliendo :
- Que las administraciones regionales garantizasen una calidad mínima de la documentación que sale a información pública;
- Que las administraciones regionales fuesen colocando a información pública los expedientes de una forma escalonada;
- Que las administraciones regionales y locales garantizasen que la información llega a la población afectada en tiempo y forma adecuada, por ejemplo, traduciendo los contenidos técnicos en mensajes “asequibles” a la población afectada e informando con calidad, rigor y transparencia (este último punto está siendo hecho humilde y limitadamente gracias a la labor que estamos haciendo desde una Plataforma Ciudadana).
Son varias las lecciones aprendidas de estos dos meses de alegaciones. A continuación, os resumimos:
Se ha comprobado con datos la burbuja especulativa eólica.
Actualmente en Asturias hay más de 1800MW de energía eólica en tramitación (en casi 60 expedientes) frente a los 429MW estimados para Asturias en la planificación estatal de la red de transporte de energía eléctrica (2021-2026), realizada por el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITERD) y en proceso de aprobación (ver propuesta de desarrollo, Figura 22, página 32).
En otras palabras, hay una potencia en tramitación que es más de 4 veces mayor que la potencia prevista de ampliación de la red eléctrica en los próximos 4 años.
Hemos encontrado más evidencias del plan de invasión eólica en el occidente asturiano.
La línea de alta tensión del eje Pesoz estima en más de 800MW su capacidad de transporte, lo cual, para hacernos una idea es mayor que la potencia total instalada en toda Asturias actualmente: 648,08 MW. Este eje muestra que existe realmente un plan de invasión eólica en el occidente asturiano, ya que al menos 29 complejos eólicos verterían a ese “eje”, siendo que no se está evaluando el impacto ambiental, social y económico del conjunto, lo cual – cuanto menos – es lamentable en pleno siglo XXI. Tenéis los detalles del “eje” en esta publicación y os animamos a que aleguéis, aunque sea fuera de plazo para mostrar a la administración vuestro rechazo social.
Siguen siendo tramitados complejos eólicos muy próximos a núcleos rurales, incumpliendo la Directriz 13.
Seguimos encontrando la vulneración de la “Directriz 13ª – Compatibilidad de usos” del Decreto 42/2008, de 15 de mayo, por el que se aprueban definitivamente las Directrices Sectoriales de Ordenación del Territorio para el aprovechamiento de la energía eólica, en cuanto a los 1.000 metros a entidades de población delimitadas como “Entidades de población delimitadas como Núcleo Rural”. Varios núcleos rurales están a menos de 1.000 metros de esta distancia.
Se empiezan a realizar estudios sinérgicos, pero aún deficitarios.
En algunos Estudios de Impacto Ambiental hemos encontrado que se empiezan a realizar algunos estudios sinérgicos de impactos, considerando los complejos eólicos existentes y en tramitación adyacentes. Dichos estudios aún son deficitarios en cuanto a datos y metodología, tal y como reconocen los propios informes:
“Aunque el gobierno asturiano proporciona una enumeración de cadáveres (desglosando por especie y año) encontrados en parques eólicos de Asturias, no se trata de información obtenida de forma sistemática ni mediante una metodología similar que permita realizar comparaciones entre sí, lo que sumado a la falta de información relativa a la metodología empleada para cada parque eólico cada año, impide su uso para estimar la mortalidad de futuros parques eólicos”. (Párrafo obtenido del EIA de Carrugueiro en la página 979 de 1.165)
Evaluación de impactos socio-económicos extremamente deficientes.
En algunos proyectos, econtramos literalmente las mismas generalidades en varios expedientes analizados (proyectos de Brañadesella, La Espina y Carrugueiro). Algunos ejemplos:
“no se estima que vayan a producirse modificaciones en la estructura poblacional de la zona como consecuencia del desarrollo del proyecto”.
“Fase de explotación: Durante la fase de explotación de las instalaciones se generará una cierta cantidad de puestos de trabajo, que, a pesar de tener una magnitud mucho menor que en el resto de fases, serán de carácter permanente. Estos puestos de trabajo se distribuirán en tareas como la gestión del parque, labores de vigilancia y mantenimiento, etc.”,
En otros incluyen alguna estimación general de empleos (proyectos de Lausía y Herradura).
Es necesario conocer cuántos empleos aporta la operación y mantenimiento de los 23 complejos eólicos en funcionamiento en Asturias, y cuántos de los mismos residen en el municipio del complejo eólico o en uno colindante, así tendríamos un orden de grandeza más realista en cuanto a empleo efectivo en el territorio.
Además, es fundamental realizar el impacto socio-económico sinérgico, considerando los complejos existentes y en tramitación y sus impactos en otros sectores como el turismo rural, servicios y ganadería. Tampoco se realiza una valoración de la pérdida de valor patrimonial en fincas y edificios derivadas de la implementación de estos polígonos industriales eólicos, ni el impacto sinérgico sobre el ya grave problema de despoblación y envejecimiento.
También estamos aprendiendo cuanto área ocupan estos polígonos industriales.
Considerando los datos de los planes especiales de La Espina y Brañadesella, hemos visto que en media por cada aerogenerador hay unas 20 hectáreas de media que pasan a ser catalogadas como “zona de infraestructura eólica”, teniendo importantes restricciones de uso, protegiendo siempre el beneficio – privado – de la generación eólica y limitando e incluso prohibiendo otros usos (como el de la caza).
Antes de terminar, nos gustaría expresar nuestro más sincero agradecimiento:
- A las personas de las áreas de derecho, medio ambiente e ingeniería que han trabajado conjuntamente para preparar las alegaciones con el tiempo disponible (muchas veces escaso) dada la avalancha;
- A las personas que han distribuido y recogido alegaciones, realizando una labor extremamente importante de informar a la población y acercarle formas de posicionarse;
- A las personas que han registrado alegaciones (daría para otra publicación las trabas encontradas en algunos lugares);
- Y especialmente a todas y cada una de las personas que se han posicionado y han alegado.
Y finalizamos, haciendo un llamamiento al sentido común para “parar y planificar” de forma que podamos realizar una transición energética justa y no la que está planteada que es totalmente inconsistente con múltiples políticas públicas (reto demográfico, medio rural, turismo rural, por citar algunas) y que deja sin oportunidades de desarrollo al Occidente Asturiano.
¡Por un rural vivo!
¡Por una transición energética justa y sostenible!